PURA GARRA DE VOLUNTAD

Como admirable ejemplo de perseverante fortaleza, la Asociación Civil Voluntades lleva 8 años trabajando todos los días al cuidado de los adultos internados en el Hospital Ramón Madariaga de la ciudad de Posadas. Dicho de tal manera parece una exageración que sea algo de todos los días, pero los integrantes de Voluntades demuestran que realmente es así. Con una estructura de trabajo sólida fomentada en experiencias anteriores, en las ganas del equipo de trabajo y la ayuda de los donantes, se han ganado el respeto del ámbito sanitario en el que se mueven. Revista Próxima Estación ha entrevistado a la señora Maia Ayrault, presidenta de la Asociación Voluntades …
"Cada vez que viajé a Buenos Aires por razones personales, me iba a algún hospital, el Garraham o el Fernández, y me conectaba con los voluntariados. El voluntariado vendría a ser una pata más que sostiene un hospital. Tenés los profesionales médicos y enfermería, tenes la parte administrativa, y el voluntariado. Cada uno tiene tareas diferentes que no lo hace el otro, y en eso está el complemento. Simplemente se copia lo que uno ve que funciona allá, porque uno no inventa nada a esta altura, y acá reproducimos en chiquito.
Cada vez el grupo tiene un compromiso más grande. Yo soy la más joven, tengo 56 años, también tenemos una voluntaria de 75 años que clasifica ropas como si tuviera 20. No se sienta durante un par de horas. Somos muy comprometidos en ese sentido, nosotros comenzamos una tarea y nunca la dejamos. Ese compromiso le sirve al enfermo. De la misma manera a nosotros nos sirve, por ejemplo, que alguien nos done una vez al año 10 camiones lleno de cosas, pero si esos 10 camiones se terminan en 2 o 3 meses, vos después si no tenés con que sostenerte, te caes en algunas cosas. Ahora si vos tenés 10 personas que te traen todos los meses cada una 2 rollos de papel higiénico, vos sabés que en el mes tenés 20 rollos de papel higiénico para 20 enfermos. A nosotros nos sirve ese tipo de trabajo, ese tipo de aporte de la gotita que en la cantidad nos permite estar en el hospital los 365 días del año con los pañales descartables, con el papel higiénico, con los jabones de tocador, con todos los artículos de higiene personal, desde la toalla hasta las sábanas, y cuando el hospital no tiene conseguimos nosotros".
"Con los pacientes que están mucho tiempo formamos vínculos estrechos porque nos vemos todas las semanas. También tenemos ejemplos de pacientes que luego de ser dados de altas se vuelven donadores de grandes cantidades de mercaderías. Con los reingresantes que están de nuevo en el Hospital nos abrazamos y les decimos “que suerte que estás de vuelta” jaja se dan diálogos muy raros por el lugar donde una está. Es que en ocasiones así uno se olvida que está en el hospital, pensás que estás en la calle.
Nosotros no suplimos totalmente al Estado; en algunas cosas sí. Pero eso es porque nuestro objetivo final es el paciente. Nosotros solo queremos mejorar la calidad de vida de los pacientes y sus estadías en el hospital.
Me encanta ir al hospital. Nos parece a todos que el día que vos le podes dar un pantalón o un pullover a alguien que tiene frío, y es eso lo único que hiciste en el día, está cumplida la tarea del voluntario.
Al hospital somos 4 lo que vamos. En estos años se armó una Red Solidaria de gente que no va al hospital. Son los que trabajan desde sus casas. Tenemos la que cose con su propia máquina de tejer, la que hace las mantas, la que arma regalos, está la que teje, la que hace croché. La Asociación está en condiciones de comprar cierres, botones e hilos para que trabajen. Y la red solidaria está bien armada, hay que mantenerla y hacerla crecer".


(fragmentos de la entrevista a la señora Maia Ayrault para nuestra revista Próxima Estación.)